
En los últimos años, el acero inoxidable cromático se ha convertido en una nueva tendencia en decoración, gozando de gran popularidad entre los clientes gracias a su atractivo color y sus excelentes propiedades mecánicas. Sin embargo, si se utiliza incorrectamente, la placa decorativa de acero inoxidable cromático puede sufrir corrosión, causada principalmente por el ambiente. En zonas costeras húmedas, la exposición al exterior de estas placas es especialmente vulnerable a la corrosión crónica. La evaporación del agua de mar, el aire húmedo y la lluvia con alto contenido de sal cubren la superficie de la placa, provocando corrosión electroquímica. Debido a la relativa debilidad del entorno, el proceso de corrosión es lento y, por lo general, difícil de detectar. Sin embargo, con el tiempo, puede dañar la superficie de la placa.
También existen razones importantes en cuanto a los materiales. Los productos más comunes en el mercado de placas decorativas de acero inoxidable de color son el acero inoxidable 201 y el acero inoxidable 304. Debido a la diferencia en el contenido de níquel, la placa decorativa de acero inoxidable de color 304 ofrece una resistencia a la corrosión muy superior a la de acero inoxidable de color 201. Por lo tanto, para uso en interiores, puede considerar el acero inoxidable 201 por su menor precio, mientras que para uso en exteriores, se recomienda la placa decorativa de acero inoxidable de color 304.
Existen causas humanas. Durante el proceso de limpieza, es posible que se utilicen algunos productos de limpieza. Estos limpiadores pueden presentar una acidez o alcalinidad leve, pero si permanecen en la superficie de la placa decorativa de acero inoxidable durante un tiempo prolongado, pueden provocar corrosión crónica. Por lo tanto, para la limpieza diaria, utilice un paño suave humedecido con agua. Evite usar detergentes fuertes con ingredientes químicos y, si los usa, asegúrese de eliminar cualquier residuo.
Fecha de publicación: 13 de mayo de 2019